Una decisión de la Corte Interamericana de Derechos Humanos afirmando el derecho de Beatriz de vivir y ser feliz también traería un grito de “Sí a una próxima Roe en América Latina”. Además, fortalecería a una sociedad en la que las niñas y las jóvenes, sus madres y abuelas, tendrían sus derechos respetados, sus sueños nutridos y sus vidas y salud protegidas.
